En Huesca, estudio y trabajo

En Huesca vivirá días de exaltación junto a la experiencia de la miseria, de la dependencia del favor ajeno, de la incertidumbre y de la falta de afecto. Allí inicia sus estudios de bachillerato y de magisterio, alternados con diversos trabajos. Es entonces cuando sufre las primeras manifestaciones de su enfermedad, una distrofia muscular progresiva que lo limitaría para los trabajos físicos.

En Huesca se matricula en el Instituto General y Técnico para cursar bachillerato, estudios que inicia con considerable retraso (a los dieciocho años) y que tiene que alternar con diversos trabajos para poder subsistir.  Su formación se amplía con los estudios de magisterio en la Escuela Normal de Huesca.

Su clara y fuerte vocación intelectual se manifiesta ya en una pasión por los libros y el estudio y en la elaboración de sus primeros escritos sobre la enseñanza práctica de la agricultura. Su interés por esta es tanto teórico como práctico: llega a realizar experiencias y diversos ensayos agrícolas que luego serán el motivo de pequeños artículos. Como muestra de su interés por la promoción del estudio y la difusión de la ciencia, en 1866 funda con otras personas el Ateneo Oscense. Él pronunciaría el discurso inaugural.

Todos estos rasgos son aún más sobresalientes y admirables si se tienen en cuenta las enormes dificultades económicas (rayanas en la más cruda pobreza) y la aparición de los primeros síntomas de su enfermedad.